Durante nuestra vida más de
alguna vez nos hemos topado con una marcha, la hemos visto en la tele o en algún documental o película sobre el
pasado y nos preguntamos ¿Por qué
protestará esta gente?
Nos llega la duda
de que existe algo que está funcionando
mal, y en lo cotidiano nos es difícil encontrar respuestas, ya que todo siempre ha sido igual.
Para el que llega a interesarse, comienza en primera instancia con informarse
por libros, documentales, preguntas a los padres etc. Y de a poco aborda el tema de la crítica como algo fundamental.
El sujeto que
llega a la convicción que solo con la organización social se puede hacer
efectiva la protesta y con ella un cambio de paradigmas; cuando
este individuo conoce estas organizaciones lamentablemente no sufre más que una decepción por la
configuración de su forma, por el berrinche de sus dogmas, por el espectáculo
de su representación: cada organización doctrinal posee líneas e ideologías políticas muchas veces divergentes entre ellas por
estupideces y egos.
He aquí donde el
individuo se encuentra en una confusión, la mayoría de los grupos están
jerárquicamente ordenados y el sujeto
no es lo importante, sino el numero, no interesa la opinión crítica, sino las
ordenes del comité central y frente a
esta posición nos decimos: si generalmente vienen ordenes de la autoridad y
frente a esas órdenes protestamos, ¿Por qué si
protestamos contra esa forma de imposición nos relacionamos de la misma
manera?
Asimismo nos
piden conciliar lo que verdaderamente nos motiva luchar, cuando entendemos que los problemas están interrelacionados por
un mismo factor: la clase dominante y su
ideología de explotación, si conciliamos no transformamos nada sustancial, es
decir aceptamos esa opresión, si no conciliamos aceptamos, y en el discurso
reformista nos llaman individualistas o “ultras” ¿pero que es más individualista
y ultra que aceptar la vida como mercancía?
¿Acaso es
individualista creer en la utopía? ¿Es individualista ceder en las convicciones
y en las formas de actuar?
No es
individualista porque el capitalismo nos es común a toda la clase explotada y no hay nadie que se salve de su opresión y miseria, excepto nosotr@s.
No es
individualista porque entiende la falta de libertad, porque entiende la
esclavitud del sistema neoliberal y de todo sistema de opresión .
No es
individualista porque existe África, Oaxaca, el wall mapu, Magallanes, nuestros
vecinos, la historia y el futuro.
No es
individualista porque creemos en otras formas de organizaciones no
necesariamente jerárquicas, donde se vela por la horizontalidad y la autonomía.
No es
individualista porque comprendemos nuestras condiciones de clase y no cederemos ningún centímetro en la
lucha.
Ahora ¿existen
formas de lucha que respeten al individuo y al colectivo?
Si, la autonomía
de los proletari@s que en su grupo de afinidad se coordinan respetando al
individuo y al colectivo, esa que se da
en asambleas y consejos orquestada
en diversos núcleos con sus propias
visiones , capacidades y métodos de lucha , pero con un objetivo común, la emancipación de la humanidad de la clase
dominante y sus secuaces.
Nuestra autonomía
juega un papel primordial, de respeto mutuo, de libertad de acción, porque en
ella la autoridad no existe, por lo tanto el camino se construye en común, esto
le da una riqueza descomunal a la utopía.
Por último lugar
el individuo es importante, pero para soñar, el cambio debe ser total, y no
solamente las innumerables injusticias que observamos cada día
sino también desde nuestras relaciones sociales.
Para nosotros las
asambleas son la columna vertebral de toda forma de vida sistemática, los
consejos son la manera mas natural de organizarnos donde se respeta mas la libertad del individuo
en pos de un colectivo sin esclavitud ni ley de ningún tipo. Nosotros queremos
una organización opuesta a la que vemos día a día y es por eso que validamos
toda forma de lucha que niegue al capital, a la clase dominante y su ideología
fascista.
Puede plantearse
desde cualquier expresión porque la anarquía y el comunismo es integral, contra
toda ideología y jerarquía, tanto contra el patriarcado, validamos la lucha
ecológica, el anti desarrollismo, los grupos de afinidad, la acción directa, la
ética anti moral, el anti arte, toda lucha contra ele stado y la mercancía. No
podemos seguir justificándonos desde nuestra propia enajenación, toda decisión
y acción es nuestra responsabilidad y solo sera verdadera si es contra lo que
nos mata la vida
¡Comunismo
anárquico o barbarie!, en ese lado nos encontram@s con nuestros camaradas, la
revolución será anti ideológica o no será
